Uruguayas

domingo, 30 de septiembre de 2018

TEXTO EXPOSITIVO


                Cuando estudiamos leemos textos expositivos. Todas las áreas del conocimiento transmiten sus contenidos a través de este tipo de texto que nos informa sobre diversos temas. Quien produce un texto expositivo tiene la intención de que el destinatario reciba información.

                ¿Para qué leemos artículos periodísticos informativos? Para enterarnos de hechos que están, de alguna manera, relacionados con la actualidad.

                ¿Para que leemos los textos de estudio? Para aprender, para recibir la información que permite profundizar en un tema, para encontrar la explicación de un fenómeno o un hecho.

                Cuando aprendemos a estudiar adquirimos distintas formas de leer y de comprender textos expositivos. De esta manera integramos a nuestro conocimiento del mundo, la información que ellos no aportan. Si no la incorporamos, no aprendemos; simplemente repetimos de manera mecánica lo que otro dijo.
                Los textos expositivos se llaman así porque exponen información, es decir que la intención del emisor es informar. Los podemos encontrar en los manuales de estudio, libros de divulgación científica, enciclopedias o medios de prensa. Estos textos pueden tener distintas estructuras, es decir que la información se puede organizar de distintas maneras.

                Sin embargo, podemos encontrar en común algunas características que permitirán identificarlos y clasificarlos en tres subtipos:
  • ·         Texto expositivo – explicativo
  • ·         Texto expositivo – descriptivo
  • ·         Texto expositivo – de clasificación


Características del texto expositivo:
  • ·         Intencionalidad general: informar. Intencionalidad específica: describir/ definir, explicar, clasificar.
  • ·         Contexto de funcionamiento: manuales de estudio, libros de divulgación científica, enciclopedias o medios de prensa.
  • ·         Uso predominante de la 3era persona gramatical para buscar objetividad.
  • ·         Uso predominante del tiempo verbal presente gnómico para buscar permanencia.