El cielo está harto de gansos tuertos...
por eso el ojo que vuela intenta espantar las moscas suicidas que molestan lo alto y los gansos perdidos que no saben qué hacer ni dónde ir. Mirá la ventana del ojo que vuela y verás el interior de una máquina de emociones y experiencias que sacudirán tu cerebro y harán vibrar los hilos que tensan dentro. ¡Acompañanos!